En una feria muy concurrida en una ciudad, había mucha gente, hermosas tiendas , mucha alegría, diversos objetos muy valiosos para la venta, etc..´
En esa feria había un lugar lleno de basura,: desperdicios
acumulados que la gente solía tirar.
Allí había una viejita que no se apartaba de ese sitio, mira que te mira,
busca que te busca.
Un joven que la había
estado observando se acercó a ella y le
preguntó qué buscaba entre esa basura. La viejita le contestó que buscaba una
aguja; lógicamente el joven pensó que la
viejita estaba loca y que no iba a encontrar su aguja en ese lugar.
Poco a poco esta viejita llamó la atención de otras
personas, quienes al enterarse que buscaba una simple aguja le dijeron porque
no la compraba en una de las tiendas, total no costaba mucho,.
Hasta que a la viejita se le ocurrió decir que la aguja que
buscaba era de oro muy valiosa, fue así
que no tardó en darse cuenta que habían
muchas personas que la acompañaban buscando esa aguja de oro.
Entonces el joven preguntó por aquí se le perdió la aguja?. No, respondió la
anciana se me perdió en la casa…El joven se quedó muy sorprendido con lo que le
dijo la anciana a lo que ella añadió: Es como ustedes los jóvenes tienen la felicidad en la casa y la buscan
fuera de ella y no la encuentran.