sábado, 17 de marzo de 2012
Semblanza por el dia del Padre
"Hay un período en el que los padres quedamos huérfanos de nuestros hijos"
Es que los niños crecen independientemente de nosotros, como árboles susurrantes y pàjaros imprudentes. Crecen sin pedir permiso a la vida. Crecen con una estridencia alegre y, a veces, con una arrogancia jactanciosa. Pero no crecen todos los días; crecen de repente.
Un día se sientan junto a tí y con una naturalidad increíble te dicen cualquier cosa que te indica que esa criatura de pañales, ya creció
¿Cuándo creció que no lo notaste? ¿Dónde quedaron las fiestas infantiles con globos y payasos? el niño crece en un ritual de obediencia orgánica y desobediencia civil.
Allí estamos nosotros, con los cabellos canos. Y esos son nuestros hijos, los que amamos a pesar de los golpes de la vida, de las escasas cosechas de paz, de malas noticias y la inflexibilidad del tiempo. Ellos crecieron amaestrados , observando y aprendiendo de nuestros errores y nuestros aciertos. Principalmente con los errores que esperamos no se repitan.
Hay un período en que los padres vamos quedando huérfanos de los hijos... Ya no los buscaremos más en las puertas de las discotecas o de los cines. Pasó el tiempo del piano, el fútbol, el ballet, la natación. Salieron del asiento de atrás y pasaron al volante de sus propias vidas.
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